viernes, 15 de marzo de 2013

la guitarra


-Es de la época de "Este presente festín". Tiene un ritmo de huayno más que de joropo.
-¿"Cardenales o gardenias"?

-Está en el disco Acerca de quien soy y no soy (1979). La Tita es fundamental porque hizo arreglos, y (el pianista) Matías Pizarro también. La armonía ya estaba hecha en el cuatro, pero ella hizo el arreglo del chelo y la guitarra, tocó la guitarra y dirigió a los músicos franceses.
-¿No la tocas muy seguido en vivo?
-No la toco nunca, porque claro, se necesita la Tita, y también porque de vuelta en Chile no es que no quiera volver atrás, pero normalmente canto esas canciones con la gente. Hay un momento en el concierto donde digo "Bueno, ahora me piden lo que quieren que cante". Y surgen las canciones más impensables. Y la gente canta.










martes, 12 de marzo de 2013

Mambo


Desde entonces han sido numerosos los artistas y muy variadas las exposiciones que han pasado por el MamBo, desde El arte del surrealismo, con obras de Breton, Dalí y Man Ray, hasta una exhibición que rescató obras perdidas del bogotano Andrés de Santamaría, pasando por la polémica Moda Latinoamericana Barbie.
Han sido cincuenta años en los que de 80 obras se pasó a 4.300 de colección permanente y que permitieron mirar, presentar, lanzar y difundir al mundo lo que estaba sucediendo artísticamente en el país.








Colombia

Unos días después, sonó el teléfono de su casa a las 4 y 30 de la mañana. Era el Presidente para decirle que las cuatro corporaciones de ahorro y vivienda de la Nación le iban a prestar cada una 10 millones, justo lo que ella había pedido. Así, en diciembre de 1985 se abrió al público la segunda etapa del Museo, con 5.500 metros cuadrados, y la exposición 100 años de arte colombiano, 1886-1986, que comisionó Betancur para conmemorar el centenario de la pasada Constitución política de Colombia.










lunes, 29 de octubre de 2012


El escritor sueco Jonas Jonasson.
Extraordinario debut literario el de este periodista sueco que podría suscitar la envidia de tantos que, tras años y años de escribir y publicar, no dejan nada que valga la pena.
La narración de Jonasson comienza en 2005 y se devuelve un siglo entero para, poco a poco, volver al punto de partida, intercalando episodios del pasado con los del presente.
La habilidad política y social (o la mera casualidad y una extraña y cómica causalidad) y su conocimiento sobre explosivos, hacen que Allan Karlsson, el protagonista, recorra prácticamente el mundo entero hasta el día de su centenario cuando decide evadirse del geriátrico y añadirle un increíble colofón a su extenso y épico periplo.
Algo tuvo que ver con todos los poderosos del siglo XX: Primo de Rivera, Franco, el científico Oppenheimer, Harry Truman, la esposa de Chiang Kai-Shek, Mao, Churchill, un hermano de Einstein, 'papaíto' Stalin, Kim Il Sung, Suharto y los presidentes Johnson y De Gaulle y un par de líderes más.






la casa

La casa grande aporta un testimonio nítido sobre una época de la literatura hispanoamericana ¿mucho más que de la literatura colombiana¿, y esto es lo que hace, en su país, la singularidad de la novela de Cepeda y de la producción de García Márquez. Lo que brilla en esta novela ¿tanto como había brillado en los cuentos de Todos estábamos a la espera¿ es la conciencia de trabajar con el lenguaje. Dicha conciencia la adquirió Cepeda, como muchos de sus contemporáneos dispersos por América Latina y entonces desconocidos, en sus lecturas de los clásicos y de los grandes autores extranjeros de su época, y también, por supuesto, en sus lecturas de escritores hispanoamericanos que el grupo de Barranquilla descubrió en fechas asombrosamente tempranas, y no sólo en relación con Colombia sino también, al menos en algunos casos, en relación con otros países del continente: 





el tiempo


Y cada vez me doy cuenta, con mayor claridad, de que el principal factor para ese vacío histórico es financiero. Pocos empresarios de medios creen que vale la pena tener en la redacción a un elemento que pase todo un día en pos de una gran historia, luego la mastique, la degluta, y la produzca con el exquisito recurso de la más poética sencillez.

Nos gusta más una moledora humana, que nos traiga tres buenas chivas, despachadas sin contemplaciones en seis gélidos párrafos.
Y aquí, mi punto: si yo me las he arreglado para hacer creer que soy cronista, ¿por qué no permitir que esa misma treta la haga cualquier elemento de la redacción? Jamás le he encargado una crónica a un periodista cualquiera de la redacción y siento que me haya decepcionado.

No defiendo la crónica por algún motivo romántico, de poeta nostálgico. Lo hago porque creo que, a través del aprovechamiento pleno de los recursos del lenguaje, del vuelo del espíritu que ella implica, de las herramientas estilísticas que aporta, de la honestidad que demanda, de su exploración real del ser humano, nos aproximamos más a la verdad.

Por eso, al tiempo que agradezco desde lo más profundo de mi alma presente este homenaje, conmino al colegaje –y sobre todo al liderazgo de los medios– a abrir las compuertas de la crónica, el reportaje y géneros afines.






jueves, 25 de octubre de 2012

Let England Shake'


Dura crítica de PJ Harvey a la política inglesa.

"Occidente está dormido, que tiemble Inglaterra. Aplastada bajo muertos silenciosos, temo que nuestra sangre no vuelva a alzarse". Con esta frase inicia 'Let England Shake', el IX álbum en estudio de la artista inglesa PJ Harvey, lanzado el año pasado y el cual le significó varios logros mediáticos como el Mercury Prize -al mejor álbum producido en Inglaterra e Irlanda-, y la elección como la artista del año en su país natal por parte de las revistas Uncut y Mojo.